sucederá de nuevo, dijo Yeats,
por eso
tras un largo viaje en que he abrazado palmeras que hoy diría
que nunca han existido y sin embargo
son ellas
comprendo por qué llevo en las manos estas gotas de lluvia
y este viejo rencor en que no caben antípodas inéditos.
Algún día sabré sin son auténticas las cosas
por las que sobrevivo,
si es lícita esta luz y este lenguaje que acaba
derretido en los ojos,
sabré si echan raíces los árboles después de que florecen
o es anterior el mar a todo intento
de reencontrar bañistas en las playas del sur.
Ahora entiendo también que sólo un niño haya sido el culpable
de asestar puñaladas a otro niño,
que sólo los verdugos reconozcan
la rara habilidad del cirujano.
Es normal que la gente se muera llevándose en el pecho
las cosas que aún le quedan por hacer,
quién sabe en qué país o en qué misterio antiquísimo
saldrá de nuevo el sol
y será savia
y viento huracanado a lo largo de sus huesos.
Y es que sólo los sueños están hechos de las mismas tristezas
con que mueren los sueños,
sólo encallan los barcos que al final del trayecto no mantienen
una ventana abierta sobre el mar.
Vicente Martín Martín (España, 1945-2012 )
Poemario "Será tan de mañana como tu piel desnuda" (2009)
XII Premio de Poesía ELADIO CABAÑERO
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